COLABORADORES

BUSQUEDAS

DIRECTORIO

Primero fueron las hidroeléctricas, que han provocado la regresión del Delta del Ebro. Luego, las nucleares (todas las de Catalunya están en estas Terres o en sus aledaños), que tuvieron el accidente de Vandellòs I (1989), que hubiese podido ser el segundo Chernóbil. Más tarde, los trasvases, ahora parados por la lucha de sus habitantes. Y ahora, los parques eólicos.

El gobierno catalán está promoviendo la instalación masiva de macroparques eólicos en estas tierras, casi todos en la comarca de la Terra Alta, una comarca deprimida, con sólo unos 12.000 habitantes, y con unos paisajes (entre ellos el del Parc Natural dels Ports) muy apreciados por los visitantes por su valor estético y también histórico (son los paisajes de la Batalla del Ebro).

Alguna gente joven de la comarca había empezado a invertir sus pequeños ahorros en un turismo rural e histórico que podía ser un buen recurso para revitalizar la zona, en la cual hay también vinos con denominación de origen, cuyo prestigio va siempre ligado a un determinado paisaje. Paisaje que resultará destrozado por los parques eólicos.

Pero aquí no quiero informar extensamente de los parques terrestres, cosa que pueden hacer mejor las gentes de esa comarca, sino de los parques marinos. La empresa Capital Energy, filial de la constructora ACS, cuyo principal accionista es la familia de Florentino Pérez, pretende ubicar frente a las costas de la Mar de l´Ebre, desde Vinaròs hasta Hospitalet de l´Infant, cinco macroparques eólicos, de los cuales el mayor se situaria frente al hemidelta derecho, con 144 aerogeneradores de 125 m de altura de torre i 45 de aspa.

Estos parques, especialmente el del Delta, perjudicarán gravemente al medio y a la economía de la costa de l´Ebre. Serán, especialmente el parque del Delta, una trampa mortal para miles de aves migratorias, entre ellas la gaviota de Audouin, muchas de ellas en peligro de extinción. Ocuparán los caladeros de muchas de las aves que habitan o vienen y val del Delta del Ebro.

Perjudicarán a la pesca, puesto que se ubicarán donde se hacen la mayor parte de las capturas. Deteriorarán el paisaje, ahuyentando al turismo incipiente. ¿A cambio de qué? Pues, a lo mejor (la ley no lo estipula), de aportaciones a las finanzas municipales, enriqueciendo, tal vez a los ayuntamientos, pero ahuyentando a la población por destrucción de sus medios de vida. Y dicen que también crearán puestos de trabajo, lo cual es una falacia enorme: la industria eólica es una de las que necesitan menos mano de obra.

Para oponerse a ellos ha nacido Salvem la Mar de l´Ebre, que ha centrado su acción, por el momento, en Sant Carles de la Ràpita, el municipio que tiene más costa frente a ese parque, dando varias charlas y conferencias y recogiendo hasta el momento 6.000 firmas en contra del macroparque. Las firmas son para presentarlas en el Ministerio de Medio Ambiente, pero han servido para presionar al alcalde, muy favorable al parque eólico, consiguiendo el compromiso del ayuntamiento de convocar un referéndum sobre el asunto.

El acuerdo municipal del referéndum es de noviembre de 2005. Desde entonces, lo único que ha hecho el alcalde es crear una comisión, de la que ha excluido a Salvem la Mar de l´Ebre (aunque, como concesión magnánima, le ha permitido dar los nombres de dos expertos), para organizar la campaña. Esa comisión se habrá reunido un par de veces en todo el tiempo transcurrido desde el acuerdo municipal y todavía ni se ha iniciado la campaña informativa ni se ha dado una fecha para la consulta, la cual, por otra parte, no será vinculante para el ayuntamiento.

Pero Salvem la Mar de l´Ebre no ha caído en la trampa del alcalde. No hace cuestión del referéndum (aunque exigirá que se convoque ya) y sigue su campaña de charlas, recogida de firmas y acciones, que realiza conjuntamente con la Plataforma en Defensa de la Terra Alta. Precisamente este viernes santo, ambos colectivos se concentrarán en Gandesa, la capital de la Terra Alta, al lado de la carretera por la que bajan las gentes aragonesas a Salou y a Sant Carles de la Ràpita, para informarles de los motivos de la protesta.

Valoración

Comentarios