LA MENTIRA EN POLÍTICA COMO MEDIO COACTIVO DE LAS CONCIENCIAS
Una información sesgada destruye la opinión pública
Los medios de información han de constrastar las informaciones para ofrecer información lo más objetiva posible. Los molinos en Tarifa se siguen construyendo contra viento y marea y la administración ofrece su lado más oscuro.
En estos días ha saltado a los medios de comunicación relacionados que el Juez de Algeciras “da la razón una vez más al Ayuntamiento de Tarifa” en relación a las instalaciones eólicas, objeto de litigio en la zona.
El valor de la palabra tiene, entre otros, el atributo de transmitir una idea, noticia y ante todo la comunicación. El problema existe, cuando la palabra no tiene valor.
Y esto sucede, cuando su contenido no corresponde con la realidad. Cuando la veracidad de lo dicho adquiere tintes sesgados, tendenciosos y partidistas y sobre todo, cuando la intencionalidad de las mismas tiene un carácter claramente desinformado.
Todos estos requisitos reúnen las afirmaciones que presuntamente el Ayuntamiento de Tarifa, a través de su última nota de prensa al Periódico El Faro del grupo Publicaciones del Sur emite en estas últimas fechas afirmando que el “Juez da, una vez más la razón” a esta Institución.
Probablemente el gabinete de imagen de una institución pública, como responsable de las notas de prensa, tendría que ser más cauteloso con lo que envía a los medios informativos o bien, quien ordena dichas notas de prensa y sus contenidos, debería ser más notablemente escrupuloso con el “derecho a la verdad informativa” – sobre todo oficial- que tiene el ciudadano y votante.
Sin embargo, como hace poco dijera José Saramago... ”vivimos en la era de la mentira”.
Entendimos que el Nobel, expresaba su grave preocupación por la discrecionalidad con la que hoy día se miente desde organismos e instituciones públicas como medio, una vez más en la historia, del controlar “las masas”. Epíteto éste, en el que se engloba a los ciudadanos de a pié y a quienes se les pedirá pronto el voto para, probablemente, en estos casos, seguir engañándoles.
Nuestra pregunta tiene que ver con la experiencia. Una experiencia almacenada durante casi dos años en las relaciones institucionales establecidas, donde se ha requerido puntual información que pudiera ofrecer la defensa eficaz de los derechos públicos.
Un silencio administrativo total, mentiras y desinformación periodística, han venido jalonando las gestiones de una entidad, también pública – esta Plataforma - que contra viento y marea sigue luchando, de forma independiente, por la voz ciudadana que ha dicho rotundamente: NO MÁS MOLINOS EN LA ZONA: Almarchal, La Zarzuela y Zahara de los Atunes – Tarifa/ Barbate- Cádiz.
Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Tarifa se siguen emitiendo notas de prensa que desvirtúan “el fondo del asunto” y confunden a unos ciudadanos que, a fuerza de golpes,...duros, siguen viendo con sus propios ojos, como la maquinaria del poder (económico y político) desoye el sentido común y la proporción en las actuaciones eólicas que se están llevando a cabo.
Unos ciudadanos que se han preguntado: ¿A quien votamos ahora?.
Se acercan las municipales. Todos los partidos irán con su mejor cara a decir una vez más, que es su interés defender los derechos y la calidad de vida de sus votantes. Sin embargo es necesario, por no decir imprescindible, elevar el coeficiente de la memoria política a más de esos tres meses que dicen los expertos que se conserva en el común de los votantes para, de una vez por todas, saber con quien, quienes!, estamos tratando.
Estamos tratando con quienes nos mienten, con quienes no han querido poner en los tribunales demandas porque, probablemente, les salpicaba. Quienes han hecho oídos sordos a las reclamaciones populares, no han atendido los informes documentales con las pruebas fehacientes de que “no todo estaba correcto” y quienes, ahora, siguen ofreciendo a la prensa a través de sus comunicados, noticias engañosas.
¿Dónde está la moral política?.
Dónde los gobernantes que realmente se ensucian los zapatos, al igual que el ciudadano, cuando ha de pisar los barros que dejan los camiones eólicos en los maltrechos caminos de acceso a sus viviendas.
Dónde los gobernantes que bajan del Olimpo de sus despachos, para ver sobre el terreno como familias enteras sufren, en los cálidos agostos, el polvo de la circulación eólica con las ventanas cerradas de sus viviendas.
Dónde los gobernantes que presumiendo de defensores del desarrollo sostenible, se acercan al lugar de la batalla para tener conciencia en directo de quienes son los buenos y quienes los malos y lo que se está haciendo con la tierra andaluza.
Probablemente sea necesario poner por detrás de la “papeleta” los errores en los que han incurrido, las deficiencias de su gestión y las necesidades elementales aún sin cubrir de aquellos ciudadanos que un día más depositarán la confianza democrática en un sistema que aún tiene mucho que aprender.
No a más molinos! de forma indiscriminada y usurpadora del medio. Sí al sentido común y aun futuro de ordenación medioambiental, para el que se están confundiendo fehacientemente los criterios de actuación, cuando no existe planificación ni concierto en los criterios cuya puesta en práctica son los verdaderos sujetos de la depredación medioambiental.
PMADS Redacción.
* A la Eólica, NO se les permitió la entrada en las tierras expropiadas... (Enlace...)
* ¿Hace falta que quemen autobuses y cajeros, para que se les atienda?
>> Autor: Asociación Vecinos de Almarchal (11/02/2007)
>> Fuente: -Plataforma para la Defensa del Medio - PMADS. Tarifa
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