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1.200 investigadors i 150 ONG demanen la desmilitarització dels pressupostos de l´estat.

10 de novembre de 2004

Un total de 1.210 científics, 151 ONG i 2032 ciutadans reclamen un fre a la tradicional precarització i militarització de la Recerca i Desenvolupament (R+D) que el projecte de Pressupostos Generals de l’Estat (PGE) de 2005 manté. Les signatures, recollides en només 15 dies, responen a una inciativa de la Campanya “Per la pau, no a la investigació militar!”.

Els investigadors, col.lectius i persones signants reclamen al govern i a les forces polítiques que en el proper debat pressupostari s’incorporin els següents canvis per a la R+D:

. transparència (separar la despesa en R+D de la despesa militar)
. suport real a la recerca (incrementant els fons no financers de R+D)

. desmilitaritzar la R+D (transferir gradualment la despesa de R+D militar a la R+D civil)

Informe sobre els Pressupostos per a R+D civil i militar 2005

Com es va denunciar en el seu dia amb “l’Informe sobre els Pressupostos 2005”, el 26,7% de la despesa pública per a recerca científica correspon a programes militars. El pressupost per a recerca militar suposa quasi 3 vegades més que el dedicat a recerca científica bàsica, font principal de finançament de les Universitats i del CSIC; més de 5 vegades el dedicat a recerca sanitària; 22 vegades més que el dedicat a recerca agrícola i 31 vegades més que el dedicat a recerca oceanogràfica i pesquera. Només 5 empreses vinculades a la indústria militar (EADS-CASA, Santa Bárbara, SENER, Izar e ITP) s’emporten el doble de diners dels que, en conjunt, reben totes les Universitats i el CSIC per a R+D civil.

Aquests pressupostos si bé suposen una aturada a l’increment dels programes de R+D militar i un augment per a la R+D civil, presenten diversos incompliments de les promeses que el PSOE va fer en el seu programa electoral. En concret, el PSOE es va comprometre a:

. comptabilitzar com a despeses de R+D “les que realment siguin utilitzades per a aquests fins, reubicant les Despeses Militars destinades a la fabricació d’armament en el lloc adequat”

. incrementar “els fons públics de recerca i desenvolupament, referits a despeses no financeres (capítols 1-7) en un 25% anual”

Cap d’aquests compromisos s’ha concretat en l’esborrany de Pressupostos. En primer lloc, els avançaments a empreses pel desenvolupament de programes militars continuen apareixent dins dels diners gestionats pel Ministeri d’Indústria. En segon lloc, l’increment més important en el pressupost per a R+D és, precisament, en el capítol 8 (transferències a empreses). I, en canvi, els capítols 1-7 tan sols augmenten un 6,3%.


Dia de la Ciència per a la Pau i el Desenvolupament

Precisament avui, Dia de la Ciència per a la Pau i el Desenvolupament, la UNESCO recorda que la ciència ha de servir per a fomentar el progrés social i la qualitat de vida de la ciudadania. Per això, des de la Campanya volem insistir en la necessitat de fomentar una R+D orientada a la millora de les condicions de vida de la població i a la resolució dels problemes socials més greus, i no a la preparació del militarisme i la guerra.

Campanya "Per la pau, no a la recerca militar!":

http://www.prouinvestigaciomilitar.org






ESCUELAS CATALANAS CONTRA VISITAS DEL EJERCITO

Más de 150 escuelas catalanas se posicionan contra las visitas del Ejército a los centros educativos

Más información: Fundació per la Pau

Canal Solidario OneWorld 2004

La campaña ‘Escuelas objetoras’ de la Fundació per la Pau denuncia los intentos del Gobierno de llevar la “cultura de defensa” al ámbito escolar a través de premios, charlas propagandísticas y propuestas educativas para los centros.

Luci Vega / Redacción (08/11/2004)

Más de 150 escuelas catalanas, el 15% de los centros de secundaria de Catalunya, se han unido en los últimos años a la campaña "Escuelas por la Paz. Escuelas Objetoras" lanzada por la Fundació per la Pau. La iniciativa nació en 1988, coincidiendo con el momento en que, tras la desaparición del servicio militar obligatorio, el Ejército tenía la necesidad de acercarse a los jóvenes y hacerlos más receptivos a los temas militares.

En esta línea, el Ministerio de Defensa propuso inicialmente un ambicioso plan dirigido al ámbito educativo que incluía la posibilidad de realizar una asignatura sobre defensa, editar libros de texto sobre esta cuestión, ofrecer cursos de formación para maestros para introducirlos en el mundo militar e incrementar las visitas de soldados a los colegios y de los alumnos a los cuarteles. Ante esta propuesta, la campaña de la Fundació per la Pau proponía a las escuelas negarse a colaborar con el Ministerio de Defensa en estos objetivos y apostar por la educación por la Paz.

La presión realizada por centros escolares, sindicatos y otras entidades llevó a que algunas de estas propuestas gubernamentales se hayan dejado de lado, aunque “la campaña sigue teniendo vigor en la actualidad, ya que la voluntad de fomentar la cultura de defensa en el ámbito escolar y contactar con los centros todavía continúa, aunque de forma menos agresiva que durante el Gobierno del PP”, afirma Jordi Armadans, director de la Fundació per la Pau.


Charlas sobre salidas profesionales en el Ejército

Actualmente la aproximación al mundo educativo por parte del Ejécito se realiza a través de diversas vías: facilitando las visitas de alumnos a cuarteles y zonas militares, realizando frecuentes charlas en escuelas de áreas marginales para informar sobre el Ejército como salida profesional o convocando premios. Por ejemplo, cada año se organizan los Premios Ejército que incluyen la categoría "Enseñanza Escolar", dirigida a profesores y alumnos, y que pretende que los menores reflejen sus impresiones sobre este cuerpo recibidas tras una visita a un establecimiento o unidad militar o por los medios de comunicación. Los participantes tienen el aliciente de poder ganar entre 1.800 euros y 3.000 euros.

Además, también se presentan propuestas educativas para las escuelas y, cuando Defensa impulsa campañas de captación de jóvenes, el material propagandístico es enviado a los centros.

Ante esta situación, nuevas escuelas continúan aún adhiriéndose a la campaña para mostrar su rechazo a la "cultura de defensa" y su apoyo a la educación por la Paz. Según la Fundació per la Pau, "ante la complejidad creciente del mundo actual, en lugar de fomentar “el espíritu militar” lo que hay que hacer es fomentar el espíritu de tolerancia, así como desarrollamos habilidades y mecanismos no-violentos para resolver los conflictos personales y colectivos"


Actua:
Los centros escolares que lo deseen pueden adherirse a la campaña.

Más información:
Fundació per la Pau

http://www.fundacioperlapau.org/pau1/menuasp.asp

Canal Solidario OneWorld 2004


LA TRASTIENDA DE LA CIENCIA: LAS BECAS DE INVESTIGACIÓN

César Ballester Pinilla in memoriam.

La creciente precariedad laboral existente en todos los sectores productivos no olvida a la investigación científica. En cada organismo público de investigación, en cada universidad o en cada centro dependiente del CSIC


CNT de Huesca


La creciente precariedad laboral existente en todos los sectores productivos no olvida a la investigación científica. En cada organismo público de investigación, en cada universidad o en cada centro dependiente del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), existe un submundo: el de l@s becari@s. Trabajan sin derechos, sin vacaciones ni horarios regulados, sin permisos por maternidad o paternidad, sin cotización a la Seguridad Social ni cotización para prestación por desempleo, sin antiguedad ni pagas extraordinarias, sin bajas por enfermedad o accidente, sin cauces definidos de queja o reclamación, sin medidas de prevención de riesgos laborales... En una palabra: trabajan sin contrato.

Según el Instituto Nacional de Estadística, en el año 2001 eran 20.000 las personas que trabajaban en la investigación científica mediante becas de diversos tipos: las becas FPI (Formación de Personal Investigador) las concede el Ministerio de Ciencia y Tecnología; las FPU (Formación de Profesorado Universitario) las convoca el Ministerio de Educación Cultura y Deporte; también están las becas de la AECI (Agencia Española de Cooperación Internacional) otorgadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores; las diversas Comunidades Autónomas y algunas entidades privadas convocan igualmente becas para investigación; y por último, y quizá las más "precarias", las becas "asociadas a proyectos de investigación" o para "prácticas en empresas", asignadas "a dedo" por profesores universitari@s, a través de las OTRI (Oficinas de Transferencia de Resultados de la Investigación) o mediante fundaciones u otro tipo de fórmulas de colaboración entre la empresa privada, las administraciones públicas y las universidades (en Aragón serían un ejemplo las becas otorgadas por FEUZ, CIRCE e ITA).

Algo tan obvio como que "investigar es trabajar" es ignorado por las diferentes administraciones y universidades. Producir conocimiento científico es como producir pan o calzado, con la diferencia de que la labor investigadora lleva asociada una ingente tarea de estudio y aprendizaje, dada la alta especialización necesaria para el avance en el saber humano o en el desarrollo de nuevas aplicaciones de tal saber. Es esta faceta de "formación continua" la que sirve de excusa a quienes defienden los sistemas de becas en la investigación, que aducen que l@s becari@s son estudiantes, aunque peinen canas o sobrepasen los 30 años con el Certificado de Vida Laboral impoluto. Los defensores de las becas suelen olvidar que aproximadamente la mitad de la producción científica en el Estado Español la hacen l@s becari@s o que las becas generalmente contienen claúsulas que prohiben firmar contratos de trabajo con otras entidades y que suelen establecer dedicaciones de 40 horas semanales (que luego serán bastantes más sin posibilidad legal de queja).

Los sindicatos "cazavotos" les suelen ignorar, pues l@s becari@s no son votantes potenciales en las elecciones sindicales. Al carecer del "status" de trabajador, l@s becari@s no tienen derechos sindicales, lo cual no quiere decir que no luchen, ni mucho menos. Una parte de quienes "disfrutan" de becas de convocatorias oficiales se organizan desde hace tiempo en diferentes asociaciones locales y territoriales, que se aglutinan en la Federación de Jóvenes Investigadores (FJI-Precarios). Sus justas reclamaciones ("ningún investigador sin contrato") son esquivadas con bastante arte por la clase política, aunque la lucha "precaria" está consiguiendo algunas mejoras en las condiciones laborales del colectivo.

En sus centros de trabajo son "exprimid@s" con diversos grados de ensañamiento. No es casualidad que FJI-Precarios haya elegido el color naranja para su simbología. L@s becari@s, además de trabajar sin contrato, muchas veces le enriquecen el curriculum a sus directores, le hacen la tesis doctoral, le preparan prácticas y material docente, le vigilan exámenes, recalan en una empresa (que ahorra costes poniendo becari@s en lugar de trabajadores) o en los servicios cualificados de las diferentes administraciones (que también ahorran de esta manera)...

El Estatuto de los Trabajadores y La Ley de Prevención de Riesgos Laborales son papel mojado para l@s becari@s. Sus condiciones laborales y los riesgos a los que se deben enfrentar no están regulad@s (más allá del insultante Estatuto del Becario, que aprobó el gobierno anterior y que mantendrá el actual, y que, además de insuficiente, es de adscripción voluntaria para el organismo "becante"). L@s becari@s no tienen derecho a una formación específica sobre los riesgos a los que se exponen, ni tiene cauces establecidos de denuncia o queja.

El 6 de septiembre de 2004 hubo que lamentar la muerte del becario zaragozano César Ballester Pinilla, de 23 años de edad. Falleció por asfixia en el interior de una cámara de fruta de "atmósfera controlada" (sin oxígeno) en la empresa Hermanos Aguilar de Ateca (Zaragoza). Trabajaba para el IRTA (Institut de Recerca i Tecnologies Agroalimentaries), un instituto perteneciente a la Generalitat de Catalunya.

Concretamente, César Ballester estaba adscrito al STP (Servei Tecnic de Postcollita), con sede en la Universitat de Lleida, aunque oficialmente "disfrutaba" de una beca OTRI dirigida desde la Escuela Politécnica Superior de Huesca por un profesor universitario de dibujo (que, dicho sea de paso, hace menos de un año presentó su tesis doctoral elaborada íntegramente por becari@s). El becario se había quejado en su entorno familiar (único cauce posible de queja) de la peligrosidad de su trabajo, en el cual llevaba un mes. La muerte del trabajador César Ballester ha sido olvidada, las circunstancias concretas de su muerte se desconocen, no hay responsables, nadie sabe nada, ni siquiera constará oficialmente como muerte por accidente laboral, pues era un becario.

En la empresa privada, y con una frecuencia creciente, las becas se convierten en una forma de contratación encubierta que resulta bastante más barata para el empresario que un contrato laboral "normal". Una entidad privada no puede tener becari@s a su cargo, pero para eso están las fundaciones diversas de tipo mixto y otro tipo de organismos "becantes", que proporcionan al empresario una mano de obra barata y altamente cualificada a precio de beca (con comisión para la "E.T.T. de becari@s" correspondiente). De esta manera se hacen "prácticas" en empresas sin contratos de prácticas o de formación (ya de por sí excesivamente precarios, pero contratos laborales al fin y al cabo); además, en la mayoría de los casos, las supuestas prácticas o investigaciones en empresas mediante becas no son tales, sino que son trabajos productivos "normales", pero con la salvedad de que carecen de una relación laboral plasmada en un contrato de trabajo.

L@s becari@s de investigación producen ciencia, conocimiento, o desarrollan aplicaciones y servicios en todos los campos del saber humano (científico-técnico, bio-sanitario, social, humanidades). Qué lineas de investigación científica se han de priorizar y qué aplicaciones y servicios se quieren desarrollar a partir de los conocimientos científicos es un capítulo que merece ser tratado aparte. Cabe señalar que la sociedad civil tiene usurpada la facultad de decidir sobre estos aspectos, pues la voraz investigación y desarrollo (I+D) militar es intrínseca al incuestionable modelo económico capitalista (el mismo que aumenta sus beneficios gracias a las becas). Para el año 2005, el Estado Español dedicará unos 1.600 millones de euros para I+D militar, ocupando el segundo puesto en cuanto a porcentaje del Producto Interior Bruto dedicado a este capítulo (por detrás de Estados Unidos). Entretanto, los principales programas de I+D civil habrán de conformarse con 838 millones de euros, de los cuales unas migajas acabarán en los bolsillos del precario colectivo becario.


Fuentes:

+ Manifiesto contra la precariedad en la investigación. 2004. Federación de Jóvenes Investigadores (FJI-Precarios).

+ Estudio bibliométrico de la producción científica del Personal Investigador en Formación y Perfeccionamiento en España. Octubre 2001. Federación de Jóvenes Investigadores (FJI-Precarios).

+ Informe sobre los presupuestos para I+D civil y militar en España. Barcelona, octubre 2004. Fundació per la Pau.

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