COLABORADORES

BUSQUEDAS

DIRECTORIO

El mismo estudio continuado de la evolución a dado numerosas respuestas a estas preguntas.

Algunas especies producen y abandonan numerosas crías. Entre la gran cantidad de ejemplares depredados, que son alimento de otras especies, algunas sobreviven y continuan el ciclo de la vida.

Otras dan tan pocas crías, que las únicas que aportan al mundo, las protegen exágeradamente hasta su vida adulta, y por ello hay menos reproducciones pero más aseguradas.

Un tercer grupo de animales dio solución a tanta tarea de cuidados y resolvieron dejarlas con otras especies para que estas se ocupasen de cuidarlas, alimentarlas y protegerlas, como son las especies oportunistas como los cucos. Aves del tamaño de un palomo que no construyen nido alguno.

Pero conocemos más bien a estas aves parásitas que tanto se nombran desde nuestra edad escolar y nunca nos hablaron de que también hay especies como el lagarto varano gigante del continente Australiano, que ha desarrollado su vida junto a nidos de termitas.

Estos nidos de termitas están ventilados mediante túneles que el lagarto aprovechará para instalar sus huevos. Las termitas sellarán esas cámaras donde los huevos colocados inteligentemente, quedarán seguros ante los depredadores listillos.

En el momento de la eclosión de los huevos, la hembra reptil del varano, romperá esa dura cámara de arcilla y los liberará.

Los huevos son instalados en estas cámaras auto-termoreguladas, húmedas y tibias durante 9 meses.
Este Lagarto gigante de 2 metros de longitud, posee un gran territorio en donde buscar huevos de pájaro y pequeños animales. Su territorio está rodeado de nidos de termitas.

Por otra parte existen peces que no comen durante la época de incubación para proteger a sus hijotes. Pues si, durante todo el periodo de cría, unos 10 días, el padre los protege dentro de su propia boca y se abstiene de alimentarse.

En el interior de la boca los jovencillos pececillos se mantienen en unas condiciones de temperatura adecuada.
Pero por alguna causa accidental, puede llegar a tragarselos.
Estamos hablando de un Cíclido de los lagos de África.
Existe otra especie de cíclido que obliga a un padre a toser y depreda a las crías que se escapan de su boca.
¿Inteligencia o es solo instinto?

Durante las primeras semanas de vida, estos pececillos buscan el refugio de la boca, cuando sospechan algún peligro externo, avisados por su padre.

Y por otra parte, tenemos a las típicas arañas cazadoras que cargan a sus crías en una pelota y las transportan de forma errante. Estas arañas cazan dependiendo de la velocidad de la presa a capturar, a la que se adecuan. Las arañas pisáuridas son ejemplares ágiles y de muy buena visión para lanzarse sobre insectos.

Esta forma de protección de sus crías tiene algunos inconvenientes.
Las arañas que construyen sus telarañas pueden de una forma más fácil proteger sus huevos, pero estas arañas cazadoras que están constantemente en movimiento, llevan con ella los huevos o abandonarlos a merced de sus depredadores.

Estas arañas cargan los huevos en una bola de seda que está pegada a sus colmillos, mientras los huevos se desarrollan. Estas bolsas pueden albergar cientos de diminutos huevecillos.
Esta araña no puede cazar por que no puede comer.
Pero sigue moviendose de aquí para allá en lugares soleados para calentar sus crías. Co mo en todas las especies debe haber una calor adecuado para mantener calientes sus huevos y ser incubados.

Otras arañas como las llamadas Lobo, construyen su bolsa para sus huevos y se la cosen en su abdomen para tener sus colmillos libres.

Cuando la madre nota que los huevos están a punto de ecosionar, hace un inciso en la bolsa para facilitar la salida de las jóvenes arañitas.

Valoración

Comentarios