| Un Militante de Greenpeace Argentina detiene un tren de maiz transgénico. |
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| ESTADOS UNIDOS. |
| Un militante argentino de Greenpeace lideraba el bloqueo de un tren que transporta maíz transgénico desde los Estados Unidos hacia México, para exigir que las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) no estén por encima de los acuerdos de las Naciones Unidas. |
La formación "tiene un largo de dos kilómetros y medio y cada vagón mide ocho metros de largo", y fue detenida en la ciudad norteamericana de Laredo.
"Más de 15 activistas se ataron con cuerdad a las estructuras de las vías para colgarse debajo del puente ferroviario sobre el Río Grande, mientras que los representantes de Greenpeace negocian con el gobierno mexicano para una interdicción en descargar en los EE.UU. el maíz transgénico que era dirigido a México", explicaron.
El convoy está inmovilizado porque "dos activistas están colgando" del mismo "cerca de las ruedas", mientras otros cuatro "están arriba del puente colgándose de modo de bloquear el tren por aire" y el resto "está debajo de los demás vagones".
La organización ecologista señaló que "un análisis científico de un laboratorio independiente de los EEUU" realizado sobre las muestras del maíz que ese país enviaba a México demostró que "casi una tercera parte "contuvo variedades del gigante de la biotecnología, Monsanto".
Al respecto, recordaron que "el protocolo de bioseguridad de Cartagena convino en enero de 2000 claras medidas de seguridad para prevenir efectos nocivos de las cosechas transgénicas en la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad".
"Este tren es el emblema mismo de la estrategia de los Estados Unidos de usar a la OMC para sus intereses, violando las convenciones internacionales de las Naciones Unidas", denunciaron.
Gustavo Ampugnani, el activista argentino que lidera el bloqueo al tren, sostuvo que "Washington está forzando a los demás países a ingresar sus productos transgénicos", y que "lo peor de esto es que ningún gobierno hace nada para remediarlo".
Luego pidió "un acuerdo internacional sin los gustos de Monsanto y de la administración Bush", y acotó que en EEUU no se le permite a esa empresa "crecer su algodón transgénico en el sur de la Florida debido a preocupaciones por la contaminación de la especie relacionada".
Al respecto, señaló que en cambio "sin vacilación, descargan su maíz transgénico en México a pesar que allí es el centro de la diversidad del maíz, uno de los tres cultivos alimenticios más importantes del mundo".
También expuso que los gobiernos permiten que "el gran negocio de la biotecnología" utilice las reglas de la OMC "para forzar cosechas como el maíz transgénico en países más pequeños incapaces de proteger la salud de su gente y el ambiente excepto con acuerdos internacionales como el protocolo de Cartagena", en el marco de la convención de Biodiversidad de las Naciones Unidas.
"El gobierno de los EE.UU. ya ha utilizado las reglas de la OMC para forzar países tales como Sri Lanka y Bolivia para aceptar el alimento transgénico", concluyó Ampugnani.
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por: cipi-cpn (19/08/2003) |
| Fuente/Autor:
Grupo de reflexión Rural. |
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