Finalmente si consideramos que las urbanizaciones y las construcciones que sobre ellas se realizan, van a tener una vida muy larga , en razón a los materiales con las que están construidas, si no son necesarias en la actualidad, y solo satisfacen los deseos de lucro de una actividad empresarial, están interviniendo en un desarrollo que según la definición de la señora Brundtland “debiera ser responsabilidad absoluta de las generaciones venideras”.
Por eso cerramos esta declaración de principios, pidiendo que se aprueben leyes, que controlen , vigilen e impidan que las urbanizaciones y las construcciones que llevan aparejadas , destruyan más suelo , más tierra, más fabricas de oxigeno y agua que las estrictamente necesarias para cubrir la cuarta necesidad del ser humano, el techo, la vivienda.
Y si se busca creación de riqueza, que se reciclen los responsables de esa función, y abandonen la rampa fácil y destructiva de la construcción, otros países nos han marcado el camino, y nuestra propia Comunidad lo ha hecho en tiempos pretéritos, llegando a estar en los primeros puestos del desarrollo económico de la nación, sin recurrir a la construcción especulativa, hoy, ahora mismo, a pesar de ella, estamos en mitad de la tabla y camino del vagón de cola de la economía española.
* He visto urbanismo masivo en Europa, pero lo de España es surrealista. (Enlace...)
Insertado por: silvia3942 (13/06/2009)
Fuente/Autor: Enrique Climent Laguarda.